Desde la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) han cifrado en 109.000 el número de vacantes que las empresas no han sido capaces de cubrir por las dificultades para conseguir y retener personal cualificado, una situación que se da pese a que en la actualidad hay más de 3 millones de desempleados, de los que más de la mitad carece de la formación necesaria. Por ello, Cepyme reclama una mayor adecuación de la formación a las necesidades de las empresas, que se fomente la movilidad geográfica y que se reduzca la burocracia para contratar.
Por su parte, desde Randstad se señala que, efectivamente, el 55 % de las empresas tiene un problema con la falta de talento. Los sectores más afectados son la educación y formación, sanidad o servicios médicos, y la ingeniería, con un 73,7 %, 73,5 % y 71,4 % de esta escasez, respectivamente. Debido a esto, abogan por crear en España un marco atractivo para ese talento, la flexibilidad y la recualificación de los profesionales, ya que en nuestro país más del 50 % de los puestos de trabajo están en riesgo de automatización.