Para la próxima campaña de Navidad, las empresas del sector logístico están teniendo dificultades para cubrir los 7.500 puestos de repartidores que van a necesitar. El perfil que buscan ha cambiado, y ya no se trata de un mero repartidor, sino que debe ser más especializado, con conocimientos de atención al cliente y de manejo de un dispositivo electrónico para, entre otras cosas, saber organizar sus rutas de forma eficiente. Un crecimiento de las exigencias que no ha ido acompañado del de los sueldos.
Este déficit se concentra en las comunidades autónomas donde hay más venta online. Y por ciudades, la escasez se hace notar especialmente en Madrid y Barcelona.