Cursar un máster o estudio de posgrado aumenta la empleabilidad de los egresados por varios motivos. En primer lugar, es un elemento diferenciador en el currículum vitae. Pero, además, sirve para perfeccionar su desarrollo profesional, científico, técnico, humanístico y artístico, y ayuda a complementar los estudios universitarios con una formación más práctica y próxima a la realidad del sector profesional, permitiendo el contacto con otros profesionales.
Según el Barómetro de empleabilidad y empleo universitarios Edición máster 2017, realizado por el Observatorio de Empleabilidad y Empleo Universitarios (OEEU), más del 50% de las personas graduadas de un máster obtuvieron su primer trabajo antes de los 6 meses. Esta efectividad varía según el tipo de estudios realizados. Así, el 53% de los graduados de másteres relacionados con Ingeniería y Arquitectura obtuvieron un empleo antes, incluso, de terminar el máster, mientras que el 26,16% de los graduados en Arte y Humanidades han tenido que permanecer más de un año en desempleo.