Las ONG emplean en nuestro país a unas 700.000 personas, que representan un 5% del total de la población activa. y el 78% de estas son mujeres. Son cada vez más jóvenes quienes se interesan por trabajar en este sector humanitario, donde buscan fundamentalmente, además de la satisfacción de ayudar al prójimo, unas valiosas experiencias vitales.
El 71,6% de los trabajadores en ONG posee estudios universitarios, y la mayoría de ellos suele realizar un posgrado en relación con el área a la que se dirigen. Esto es especialmente llamativo en un sector en el que los salarios, incentivos y estabilidad laboral no son su principal atractivo, y que, además, suele ser tachado de intrusista.