Gracias a la tecnología blockchain, ya es posible certificar una trayectoria académica o profesional, con lo que las empresas y sus reclutadores pueden tener las plenas garantías sobre las titulaciones y la experiencia de sus candidatos. Así, los certificados serán imposibles de falsificar, y mentir el el currículum carecerá por completo de sentido.
Sin embargo, desarrollar esta idea a corto plazo no es fácil. Habría que generar algún tipo de red pública para que esos certificados y esas trayectorias profesionales se pudieran archivar, y que quedase su constancia para el futuro, de manera que no pudiera ser modificada arbitrariamente.