En la crisis provocada el coronavirus, hay negocios que parecen salir reforzados y con nuevas potencialidades. En este artículo se destacan especialmente estos cinco:
- Comercio electrónico y supermercados regionales: Según el último informe de la consultora Kantar, el gran consumo ha crecido este año un 14,2% en valor y un 12% en volumen, con picos del 25,7% y del 25% durante el confinamiento. Mientras que los tres líderes de la distribución en España —Mercadona, Carrefour y Dia— perdieron cuota de mercado por el cierre de la hostelería, las cadenas regionales como Consum, AhorraMás o Bon Preu se hacían con el 14,6%, ocho décimas más que en 2019, aunque durante el confinamiento superaron el 16%.
- Producción de conservas: Anticipándose a un posible confinamiento, las familias hacen acopio de los productos que temen no poder adquirir en el caso de tener que limitar sus desplazamientos. Artículos de primera necesidad, conservas y productos de droguería fueron los principales protagonistas de las llamadas compras búnker antes del confinamiento decretado en marzo.
- Bicicletas: Tras el confinamiento, cuando los ciudadanos pudieron salir de casa, éstos se lanzaron al deporte individual por las calles, corriendo o en bicicleta. De hecho, la compraventa de bicicletas se disparó como forma de deporte al aire libre, pero también como medio de desplazamiento seguro para evitar contagios.
- Comida a domicilio: El 23% de los españoles asegura que ha incrementado el consumo de comida a domicilio durante el confinamiento. El 63% ha utilizado algún servicio de delivery como Just Eat, Glovo, Deliveroo o Uber Eats y, de estos, el 18% ha optado incluso por probar lugares nuevos.
- Tienda del barrio: Según el último estudio de Mastercard, tres de cada cuatro españoles compran ahora más en los comercios de sus barrios que hace un año y el 66% está gastando más en ellos, y de forma consciente y solidaria con el comercio local.