Al ser seleccionados vemos nuestro objetivo cumplido, meta conseguida, al final hemos encontrado empleo, después de un proceso duro y a veces largo.
El contrato de trabajo es un documento donde se establece la relación contractual entre el empleador y el trabajador. Debe recoger las condiciones laborales, y estas, se deben ajustar a lo hablado en la entrevista. Es importante ir serenos a la firma del contrato. En ese momento se baja la guardia y se va confiado. Es cierto que queremos firmar, pero antes hay que leer detenidamente dicho contrato de trabajo.
Qué revisar en el contrato de trabajo:
1.-Tipo de contrato: indefinido, fijo-discontinuo, temporal, de relevo, de prácticas o de formación en alternancia. Si es temporal, debe aparecer la duración.
2.-La duración del periodo de prueba. El Estatuto de los Trabajadores (ET) establece límites máximos de duración: 2 meses para los trabajadores que no sean técnicos titulados, en empresas de al menos 25 trabajadores; hasta un máximo de tres meses, en empresas de menos de 25 trabajadores; hasta 6 meses, para trabajadores titulados.
3.-Salario y retribución de las horas extraordinarias. Pagas extraordinarias, si están prorrateadas o son aparte.
4.-Puesto de trabajo y categoría profesional.
5.-Jornada de trabajo, horario y turnos. Por ejemplo, si debes trabajar o no los fines de semana.
6.-Convenio colectivo al que pertenecemos.
7.-Vacaciones. Según el ET son 30 días naturales al año, lo que supone 2,5 días por mes trabajado, equivalentes a 22 días laborables.
8.-Revisar posibles anexos o cláusulas adicionales. Por ejemplo, si existe un pacto de no competencia.
El contrato debe realizarse por escrito, aunque puede ser verbal cuando es indefinido y a jornada completa, o en los contratos temporales a jornada completa, si estos últimos tienen una duración igual o inferior a cuatro semanas. Si la empresa lo incumple, se presume que el trabajador es indefinido a jornada completa.